De omgeving was erg centraal. De kamers waren wel gedateerd. Maar in prijs/kwaliteits verhouding is het wel goed. Zeker de moeite waard om daar terug te gaan. Het ontbijt stelt niks voor.
'Faded Splendour' is how I would describe this place, plus quirky, with its lime green and blue walls, and reproduction art hung EVERYWHERE. Definitely shabby chic. I really liked it, but my partner was concerned about the lack of Covid distancing with big groups of people at the main reception when we arrived.
Es un edificio clĂĄsico, con historia para recrear la vista en el pasado.
Algunos elementos del inmueble podrĂan mejorar su aspecto con alguna reforma o arreglo de poco calado.
No lo recomiendo. Los apartamentos quedan en otro lugar de la recepciĂłn y no lo indica en la reserva por lo que estuvimos caminando de mĂĄs con las valijas.
El estado era regular a malo. Mucho olor a cigarrillo en el apartamento. Baño despintado y con humedad. El living tenĂa levantado un metal lo que puso en peligro los pies de mis hijos.
Lo Ășnico rescatable por 3 euros es el desayuno buffet.