La experiencia ha sido horrible. Mala comunicación para poder llegar al sitio, no contestaban al móvil y lo explicaban todo muy rápido y sin consideración. A las 6 de la mañana hubo un corte de luz y se encendió en la habitación una luz que no era posible apagarse ya que era como una luz led, fatal ya que no nos permitió dormir más, además de que no podíamos cargar ningún dispositivo ya que no había luz y no nos daban ningún tipo de información de cuándo podía volver. Al no haber luz, el restaurante que se encarga del desayuno que va incluido nos decía que tenían las cocinas cerradas y no nos podías poner desayuno. Llamamos bastantes veces al número que aparece para contactar con el alojamiento y no nos respondieron y cuando lo hicieron no nos dieron solución. Tras mucho insistir, el del restaurante accedió a ponernos un café y una tortilla, todo desde el desdén y con una mala educación ya que los perjudicados éramos nosotros que habíamos pagado el desayuno includio. En definitiva, el trato malísimo y malísima atención ante un imprevisto. Desde luego no recomendaría a nadie este alojamiento. Estuvimos 10 días Croacia, y en todos los sitios nos trataron genial y con mucha amabilidad pero este nos dejó un sabor muy amargo ya que nos despedíamos del país ese día, una pena.
